Juan Pablo II fue uno de los papas que más influyó en la sociedad, fue el hombre que supo perdonar lo imperdonable
Ser el máximo mandatario de la iglesia cristiana-Católica siempre ha sido ser foco de envidias y rencores muy peligrosos.
No son pocos los papas de los que hay ciertas dudas sobre las causas reales de su muerte, aunque la versión oficial es que fuera por causas naturales, hay otros de los que directamente se sabe que fueron asesinados.
En el común de los mortales cuando hay dudas acerca de las causas de la muerte se realiza un procedimiento forense denominado “autopsia” en el cual por medio de diferentes técnicas los expertos en medicina forense son capaces de aclarar datos como el momento aproximado de la muerte y las causas de la misma. En el caso de los papas de la iglesia católica no se les puede realizar dicho procedimiento, pues su cuerpo no puede ser profanado con técnicas como esta.
En la era moderna, en pleno siglo XX no estamos exentos de este tipo de intrigas sin ir más lejos, hoy se cumplen 43 años de uno de los intentos de asesinato que sufrió durante su vida el papa Juan Pablo II.
Sufrió un total de 3 intentos de asesinato, del que hoy se cumplen 43 años, quizá sea el menos conocido, sucedió como decimos 13 de mayo de 1982, un año después de su intento de atentado más célebre, el perpetrado por el turco Ali Ağca.
Intento de asesinato en Fátima
El intento de asesinato del que hoy nos ocupamos ocurrió justo un año después de este tan célebre intento, ocurrió durante una visita del papa al santuario de nuestra señora de Fátima, en Portugal.
Juan Pablo II fue siempre muy devoto de la virgen de Fátima muestra de ello es que en el primer aniversario del intento de asesinato a tiros que sufrió en Roma decidió realizar una visita de peregrinación a Fátima para entregar una de las balas con la que había sido herido con la intención de que fuera instalada en la corona de la imagen de la santa (de hecho, hoy en día allí sigue).
El atentado a Juan Pablo II
El sacerdote de ideología de extrema derecha Juan Fernández Krohn accedió al santuario con la supuesta intención de estar presente durante la visita papal, lo que nadie sabía era que llevaba oculta una bayoneta de 37 cm con la que en un momento de la visita intento abalanzarse sobre Karol Wojtyla, suerte que el personal de seguridad reaccionó a tiempo para poder detener al malhechor.
El intento de asesinato quedo en un mero susto con las únicas heridas en la mente del que lo sufrió o de los que lo presenciaron, el sacerdote estuvo 6 años y medio en la cárcel por este hecho.
Consecuencias del intento de asesinato.
Como consecuencia de los dos intentos de asesinato que sufrió Juan Pablo II en dos ocasiones en el espacio de un año se reforzó muchísimo más las medidas de seguridad en torno al papa en cualquiera de las actividades que realizaba prueba de ello es que paso de usar coches descubiertos en sus desfiles a coches con cúpula de cristal blindado y que el espacio entre los espectadores y él en los múltiples actos que presidía era siempre mayor a lo anterior y además este espacio estaba siempre mayormente poblado por personal de la guardia suiza los encargados de la seguridad papal desde hacer varios siglos.
Perdón de Juan Pablo II a Ali Ağca
El papa siempre mantuvo una extraña relación de cercanía con el terrorista turco que intento asesinarle en el año 1981. Incluso le realizó frecuentes visitas a la cárcel en la que estaba el reo, y llego a mostrar públicamente que le perdonaba por aquello, no puso la otra mejilla, pero Juan Pablo II fue un hombre muy atípicamente comprensivo para lo que la historia ha demostrado de los diferentes jefes de la iglesia católica.