Una de las partes de la estrategia militar de la que quizá menos se hable sea el uso defensivo de algunas estructuras.
En todas las guerras se habla de los vencedores y vencidos, independientemente de quienes sean los atacantes o lo defensores, y el caso de la Guerra Civil Española no es menos.
Cuando entre el 17 y el 18 de julio de 1936 las tropas al mando del general Emilio Mola se sublevan contra el gobierno de la II República, encarnado en la figura de Manuel Azaña Díaz, España se tiñe de las campanas de guerra que se prolongaron por 3 años.
Para poder encarar la situación y aguantar la sublevación Azaña encarga a Diego Martínez Barrio la formación de un gobierno que hiciera frente a la rebelión. No fue posible aplastarla pero por otro lado los sublevados tampoco pudieron hacerse con todo el país, pues en mucha provincias (principalmente Madrid o amplias zonas del levante) el gobierno central de la República logró mantener el control.
La batalla de Brunete fue clave para la Guerra Civil
La guerra civil española se prolongo hasta el 1 de abril de 1939 y en ella hubo batallas memorables como la del Ebro o la de Brunete, es esta última la que nos ocupa hoy.
La fase activa de la batalla de Brunete se abrió el 6 de julio de 1937 y se cerró el día 25 del mismo mes y fue fruto de un plan ofensivo de las fuerzas de la república para ganar terreno en la zona oeste de la Comunidad de Madrid. Entre el bando de los republicanos y el bando nacional, más los combatientes aliados de ambos, hubo un total de 150.000 hombres, 220 piezas de artillería republicana, 130 tanques republicanos, 40 carros blindados republicanos.
En el aire la batalla también fue cruenta y contó con 300 aviones por parte republicana y 280 aviones en el bando nacional (80 de ellos pertenecientes a la legion condor alemana).
En el capitulo de las pérdidas cabe destacar 25.000 bajas y entre 60 y 100 aviones en el bando republicano. Entre los nacionales las perdidas también fueron notables, aunque inferiores en número. Se estima que la cifra de muertos y heridos se sitúa en los 17.000 hombres y la de aviones destruídos entre 23 y 25.
Blockhaus-13, el búnker basado en la I Guerra Mundial
Tras este breve resumen de la batalla de Brunete vamos a centrarnos en nuestro protagonista de hoy, el “Blockhaus-13”.
El blockhaus-13 pertenece a una serie de fortificaciones que construyeron a finales de 1938 las fuerzas nacionales en la zona que el año anterior se había desarrollado la batalla de Brunete pues temían de un contraataque de las tropas republicanas acantonadas en la zona oeste de Madrid.
El numero 13 en concreto fue construido por la 2ª compañía del 7º batallón de zapadores de las fuerzas nacionales, es el mejor conservado hoy en día y se sitúa en el termino municipal de Colmenar de Arroyo y muy cerca del casco urbano de esta población. Concretamente se encuentra a la altura del km 33,670 de la M-510.
Tiene 160m2 de planta y dispone de un nido principal en el centro de 10 metros de diámetro que servía para montar en su cúpula un arma antiaérea o de artillería. Además está dispone de otros 4 nidos más pequeños con troneras tanto para cañones como para fusilería.
El “Blockhaus 13” está incluido en el Plan de Fortificaciones de la Guerra Civil de la Comunidad de Madrid, que tiene como objetivo la revitalización del patrimonio local planteando un proyecto cultural común, basado en el binomio paisaje y patrimonio, a partir de la localización, catalogación, conservación y difusión de los restos materiales de la guerra en la región.
Por el pasillo que conecta los diferentes nidos y el principal también hay de forma periódica una serie de troneras estas en su caso son exclusivamente para usar con elementos de fusilería.
Cómo visitar el bunker Blockhouse 13
La visita a día de hoy es libre y en las inmediaciones hay algún camino donde poder aparcar el coche.
Aunque la zona está limpia, no se encuentra adaptada a personas con problemas de movilidad y el riesgo de resbalones y caídas es alto por las circunstancias de la edificación.
El estado de conservación, sin ser mala del todo, tampoco es la óptima para un edificio histórico como son estos bunkers.